Cuidados de la piel anciana

En nuestra residencia geriátrica en Barcelona sabemos que con el paso de los años la piel empeora provocando malestar y un empeoramiento en la calidad de vida del anciano. Por eso, es fundamental entender qué es lo que está sucediendo y qué cuidados hay que proporcionar para favorecer la salud de las personas mayores.

Higiene y cuidados de la piel en los ancianos

La piel, aunque es un órgano externo, se nutre desde el interior, por lo que la afectan los hábitos nutricionales y en general, de vida. Por eso es importante mantener una buena alimentación, tenerla siempre bien hidratada y evitar productos nocivos como el alcohol y el tabaco. Además, hay que protegerse del sol, no solamente con crema, sino también con sombreros y gafas de sol.

Para las personas mayores están recomendados champús y geles de baño que no contengan detergentes y que sean lo más suaves posible. Después del baño es necesario usar una crema emoliente prescrita por un farmacéutico o médico. Para la cara, es más aconsejable usar una leche limpiadora una vez al día. Las zonas más sensibles se pueden tratar con aceite de rosa mosqueta que tiene propiedades regeneradoras, cicatrizantes e hidratantes.

También hay que tener especial cuidado con las zonas en las que existe más roce como pueden ser los talones por el uso del calzado. También en la zona de las ingles si la persona utiliza absorbentes para la incontinencia urinaria. Para estas necesidades, se recomienda usar de manera preventiva cremas específicas y apósitos.