Indicadores de que es necesaria ayuda externa

No es habitual que los matrimonios de ancianos, que han vivido juntos durante mucho tiempo aprendan a adaptarse hasta el punto de compensar las debilidades de sus cónyuges. Llega un momento en el que es necesaria ayuda externa, como la ofrecida en una residencia geriátrica en Barcelona.

Cuándo hace falta ayuda externa

No es necesario esperar a que ocurra un accidente, suele haber indicadores evidentes de que se necesita ayuda externa:

• Pérdida de la capacidad de realizar tareas rutinarias: Las personas necesitan ayuda externa cuando pierden la capacidad de mantener una rutina y hacer ciertas cosas por sí mismas (realizar la compra, bañarse, vestirse, usar el inodoro…).
• Problemas cognitivos o de movilidad: Es hora de pedir ayuda si hay problemas cognitivos o de movilidad que hacen peligroso que nuestros ancianos estén sin ayuda externa. Si no se acuerdan de apagar la estufa, o si están experimentando caídas frecuentes, es importante tener un acompañante que pueda vigilarlos y ayudarlos a asegurarse de que no se lastimen.
• Soledad y aburrimiento: Largos períodos de tiempo sin interacción social a menudo pueden llevar a la depresión. Llevar a un acompañante a la casa, puede ser como encender una luz en una habitación oscura. Todos nos cansamos de nuestras propias historias. Las conversaciones entre los miembros de la familia a menudo se vuelven rutinarias y mundanas. Un compañero feliz, enérgico y empático puede proporcionar nuevas historias y escuchar las viejas con interés, lo que hace que el receptor de la atención se sienta como si fuera una persona digna de amistad.